Te seré sincero. Si alguien hubiera tratado de venderme sistemas online de captación y venta de propiedades en automático durante mi etapa como agente inmobiliario, le hubiera preguntado lo siguiente:
«¿Si tan seguro estás de tu método, por qué no lo haces tú? Seguro que te forras.»
Una respuesta básica, formulada desde el ego y con la soberbia de pensar que lo sé todo de algo.
Hoy, mi forma de pensar ha cambiado.
No obstante…
… la verdad es que conozco muy pocos profesionales que de verdad entiendan lo suficiente este sector como para diseñar sistemas efectivos de venta y captación online en automático.
¿Qué tiene que ver todo esto con mi decisión de dejar de trabajar como agente inmobiliario, después de más de 12 años haciéndolo?
Pues tiene mucho que ver y, al mismo tiempo, poco que ver.
La cuestión es que todo surgió de mi necesidad repentina de alcanzar un tipo de libertad que no consiste en tener más dinero, ni en trabajar menos, ni en conseguir la libertad financiera que me permita jubilarme a los 40.
Nada de eso.
Lo único que quería era poder trabajar desde cualquier lugar del mundo, cualquier día, a cualquier hora.
Quería eliminar de mi vida el horario de apertura y la obligatoriedad de permanecer en un determinado lugar para poder desarrollar mi actividad.
Por ejemplo, hoy es martes, son las 5:00 de la mañana, y estoy fuera de España.
Y nada me impide aprovechar las primeras horas del día para trabajar y así dedicar el resto del día a hacer lo que he venido a hacer.
Y no se trata de un viaje de placer. No es, en absoluto, nada parecido a unas vacaciones.
Pero eso no es lo importante.
Lo importante, al menos para mí, es que he podido llevar a cabo un viaje de varios días sin demasiados problemas ni planificación previa, gracias a que mi trabajo no depende de un lugar concreto ni de un horario rígido.
…
Llegados hasta aquí, creo que es buen momento para relacionar la historia que acabo de contar, con tu negocio.
Al fin y al cabo, este blog va sobre todo de eso, de cómo utilizar el marketing digital para hacer crecer tu negocio inmobiliario.
Como te decía al principio, antes de dedicarme a esto, hubiera dudado mucho de la posibilidad de crear automatismos que me permitieran captar y vender sin salir a la calle.
¿Qué creo ahora?
En primer lugar sé, porque lo he visto con mis propios ojos, que, gracias a internet, cualquier profesional inmobiliario, ya sea agente, asesor financiero, personal shopper o home stager, puede llegar a nuevos clientes sin necesidad de salir a la calle ni de pasarse el día haciendo llamadas en frío.
Pero, al mismo tiempo, también sé que no es nada fácil, ni tampoco necesariamente barato, hacerlo bien.
En segundo lugar, y esto es algo que entendemos mejor quienes nos dedicamos o nos hemos dedicado a este sector, sé que captar y vender son dos cosas totalmente distintas.
Y como son dos cosas distintas, no se pueden trabajar de la misma manera, ni online ni offline.
¿Es posible aprovechar las redes sociales, tanto en su versión gratuita como a través de sus plataformas de publicidad de pago, para vender un piso?
Absoluta y rotundamente, sí.
De hecho, a lo largo de estos años, he podido ver a clientes míos vendiendo en Facebook sin invertir ni un euro.
Ahora bien, hablamos de inmobiliarias con una comunidad fiel y consolidada, construida con paciencia, mimo, cariño y tiempo.
También he visto como una agencia de una pequeña localidad de Barcelona vendía una casa de casi un millón de euros, invirtiendo menos de 3 euros al día en Instagram y en Facebook.
Una casa que, tras pasar varios meses dando vueltas en portales inmobiliarios, apenas tuvo repercusión.
Captar, como imaginarás, es otra historia.
Por un lado, «captar» no consiste en vender un producto, sino un servicio.
Y, para vender un servicio como el inmobiliario, se tienen en cuenta factores como la confianza, la autoridad, el customer journey y un largo etc.
A la hora de vender un servicio como el inmobiliario, los funnels, el inbound marketing o la reputación adquieren un mayor protagonismo.
En definitiva, para vender un servicio como el inmobiliario no suele ser suficiente un anuncio resultón en una red social.
Probablemente hará falta un sistema más complejo, menos automático, con llamadas de seguimiento y lead nurturing, lo cual se traducirá en más tiempo y mayor inversión.
¿Quiero decir con esto que no es posible captar propiedades online?
En absoluto. Solo quiere decir que, hacerlo bien, no es fácil.
Y te cuento esto desde mi experiencia porque, a pesar de que no me dedico a montar este tipo de estrategias (yo lo que hago, principalmente, es diseño web y copywriting), he colaborado con varias empresas de marketing que sí lo hacen, y tengo alguna idea de cómo les ha ido.
Ahora…
¿Cuál es la razón nº1 de que dejara mi trabajo como agente inmobiliario?
Sencillo: quería la flexibilidad que da trabajar en un negocio digital.
Y eso me lleva al quid de la cuestión.
Todos, en mayor o menor medida, valoramos el concepto de flexibilidad.
Por ejemplo, mis clientes, tus clientes, valoran la flexibilidad de poder consultar nuestros servicios de forma clara y sencilla, desde cualquier dispositivo y en cualquier momento del día, sin tener que llamarnos ni visitarnos en persona.
Por esa razón, invertir en una web que les proporcione una buena experiencia de uso, es algo a considerar.
Tú también valoras la flexibilidad en tu negocio, sobre todo porque la puerta fría tiene sus límites.
Por esa razón, disponer de canales alternativos que te ayuden a captar y vender de formas menos tradicionales, tiene hoy más sentido que nunca.
Si hay algo que he aprendido gracias a La inmobiliaria digital, es que hay dos tipos de profesionales inmobiliarios.
Los primeros, ven internet como una oportunidad para crecer y romper los límites propios de cualquier negocio físico.
Los segundos, perciben internet como un enemigo, alguien o algo contra lo que hay que luchar porque pone en riesgo la forma de siempre hacer las cosas.
Te confesaré algo.
Personalmente, no tengo nada en contra ni a favor de internet.
De hecho, al menos para mí, lo mejor de la vida está fuera de la red.
Pero hay algo que está por encima de mis gustos, de mis preferencias y de mi amor por la vida sin conexión, y es que no hay nada como internet cuando se trata de llegar al mayor número posible de personas, al menos por ahora.
Y no te quepa duda de que, si tienes un negocio, solo por eso, merece la pena intentarlo.
